Miguel Touceda, alma de guitarrero y cantor

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2 Octubre, 2016 a las 13:19 hs.

Desde los 6 años está involucrado con el folclore. Ahora sueña que alguno de sus nueve nietos siga el camino de la música.



Nació el 13 de Octubre de 1953 en el “Viejo” Hospital que ahora es el Correccional de calle 10 y la 1. Sus padres a quién sigue admirando fallecieron cuando él era joven. El era mecánico, empleado de la Ford y su mamá ama de casa. 

En su casa se escuchaba mucha música y como costumbre de aquel entonces, la radio estaba prendida todo el día. Su mamá sabía tocar la guitarra y sus tíos Servando y Nicanor Peralta, eran casi todos guitarreros.

Cuenta que en la habitación de su hogar había una guitarra marca tango, que no tenía estuche y que estaba colgada con una tira al lado de su ropero. “Siempre estuve rodeado de la música”.

Para agregarle datos a esta definición contó que a lado de su casa vivía “Lolo” Alzamora que era un violinista y cuenta que se ponía a repasar partituras y cosas en el patio y  él siempre lo escuchaba. “Algunas veces me invitaba para que lo siguiera con la guitarra”.

Al frente de su casa vivían los hermano Araya ( Segundo Araya tocaba el bandoneón y  Vicente la guitarra) que eran dos grandes animadores de General Milonga. “Todos los chicos del barrio los escuchaban ensayar todas las tardes” señaló. “Diría que ahí nace mi  inclinación hacia la guitarra, el instrumento que siempre quise y que tuve cerca”.

Tiene dos hermanos mellizos María Rosa y Mario Jorge que le marcaron la vida pues nacieron el mismo día en que Miguel cumplía dos años.  Recuerda sus tardes en la vereda de su casa ubicada en Barrio Energía y Progreso.

Cuenta que fue a la Escuela N° 66, según Miguel, la escuela más popular y linda de la ciudad, que albergaba a hijos de obreros, de laburantes. Su promoción que van a cumplir 50 años paso directamente de quinto grado a séptimo y él considera con su amiga Liliana Ríos que fueron la promoción más inteligente. 

Empezó a bailar a los 6 años folklore en el Centro  Tradicionalista “El Lucero” que estaba ubicado en calle 22 y 19. Grandes familias de pico  concurrían a ese lugar.

A los 14 años y a pesar de jugar al fútbol en Cultural Argentino se dicidió definitivamente por el folclore al ser convocado para formar parte del elenco estable de Peña “El Alero”.

Ahí conoció a Heraldo Hernández, Alfredo Guerra, Pelizzari, Los Arrieros, El Chango Nuñez  y muchos más, “hasta que un día Gloria Fernández necesitaba un guitarrista, y debuto oficialmente con ella en el espectáculo”.

Afirma que, General Pico, es su lugar en el mundo; que tiene muy buenos amigos y que en el “Viejo Galpón” está su vida. “Todo lo que buscaba lo encontré ahí”.

Para finalizar remarcó que su sueño es que algunos de sus nietos tenga intención musical y que si tuviera una máquina del tiempo le gustaría volver al lugar y a la hora en que nació su primer hijo.