Por Norberto G. Asquini
La reunión que hoy mantendrá el presidente Mauricio Macri con los intendentes de todo el país en Tecnópolis es un acto político que parece marcar un capítulo del “nuevo federalismo” que pretende imponer el gobierno nacional. La relación directa de Nación, o el macrismo, con los municipios que parece imponerse como estrategia no es una maniobra novedosa y fue cultivada durante el kirchnerismo a fuerza de centralismo económico y político.
La actividad en Ciudad de Buenos Aries se puede dividir en dos etapas. Una es la jornada de hoy para todos los intendentes de cualquier signo político. La otra fue el día previo con otra reunión que fue más “partidaria” en la que Cambiemos reunió a muchos de los jefes comunales que integran esa alianza en un avance más de su construcción territorial. De La Pampa estuvo el intendente radical de Santa Rosa, Leandro Altolaguirre, y varios más. Al encuentro de hoy se sumarían otros del Frepam y algunos del justicialismo.
“Nos quieren puentear”, afirmó sobre la reunión de hoy en Tecnópolis un alto funcionario del gobierno provincial. Del lado del macrismo, estaba el temor que desde la gestión justicialista se boicoteara la asistencia.
Las prevenciones estaban y no por nada. La fuente consultada indicó que desde Provincia se había dado luz verde a los jefes comunales del PJ para que fueran. Pero cayó mal que solo estuvieran invitados algunos gobernadores y otros no. Los peronistas, entre ellos Carlos Verna, no fueron convocados, pero sí los de Cambiemos como la bonaerense María Eugenia Vidal, el mendocino Alfredo Cornejo o el jujeño Gerardo Morales.
Algunos analistas de medios nacionales indicaron que la reunión también es un mensaje a los mandatarios provinciales opositores que asumen posturas duras para con el gobierno macrista, sobre todo en el tema de la Ley de Presupuesto que se trata en el Congreso. El gesto parece indicar que se está dispuesto al diálogo, pero también que llegado el caso se puede saltear la instancia provincial y trabajar directamente con las comunas. En ese sentido, Verna tiene más que controlada la situación interna. Ha sabido alambrar la provincia en más de una oportunidad.
Desde la oposición se habló de que pudo haber sugerencias y hasta alguna orden del gobierno pampeano para que los intendentes justicialistas no fueran. “¿Para qué les vamos a decir que no vayan a nuestros intendentes si se desalientan solos? Piden obras y presentan proyectos y no reciben nada. Por eso muchos no fueron. ¿para qué gastar plata en nafta para seguir como hasta ahora?”, indicó la fuente mientras negaba sistemáticamente con la cabeza. Uno de los que había informado que iba a estar era el jefe comunal de Ingeniero Luiggi, Oscar Zanoli, con contactos personales fluidos entre los nuevos funcionarios y quien había presentado más de diez proyectos que todavía esperan su curso en las oficinas de la administración nacional. Una muestra de lo que se quiere significar.
Varios de los intendentes pampeanos que estarán en Tecnópolis estarán presentes por cuestiones institucionales, no solo porque se firmaban convenios, sino también por la posibilidad de tener contacto con funcionarios nacionales y poder recibir al menos promesas.
Otras fueron las motivaciones para viajar de algunos radicales. En este grupo se mezclaron cuestiones de gestión con los motivos políticos. Una fuente radical indicó que hubo sugerencias de algún legislador nacional que fue intendente de su pueblo en el interior para frenar los viajes de los propios. La asistencia de los jefes comunales de la UCR a la reunión del jueves marcó la discusión interna que hay en el Frepam entre Cambiemos-si y Cambiemos-no. Entre los que quieren blindar el Frepam y los que escuchan los cantos de sirenas de la alianza con el macrismo. El jueves a la noche mientras algunos intendentes radicales asistían a escuchar a pares suyos de Cambiemos y altos funcionarios nacionales como el ministro del Interior, Rogelio Frigerio; otros radicales se reunían en Macachín en un acto con el histórico Hipólito Solari Yrigoyen, un crítico de primera hora a la alianza de la UCR con el PRO.
Dentro del radicalismo la cuerda se tensa de un lado y del otro. No hay una única línea de acción y sobran los líberos sobre todo entre los intendentes y los mensajes ambiguos como los del senador Juan Carlos Marino que por un lado enfrenta al PRO en territorio pampeano y por el otro hace buenas migas con algunos funcionarios nacionales. En ese sentido, en La Pampa, el “nuevo federalismo” parece afectar políticamente más a la oposición que al oficialismo.