El Legislador nacional, Daniel Lovera, se expresó en el marco del Día del Empleado de Comercio señalando que este en particular es “un día muy especial por la situación del país. Estamos entrando en momentos que marcarán la historia de los trabajadores en cuanto a mantener e incrementar sus conquistas frente a los que dicen que ponemos palos en la rueda o que somos muy litigiosos”, señaló.
En un comunicado de prensa el legislador pampeano sostuvo:
“Creo que este desafío nos hará más grandes, más justos y sobre todo más fuertes ante los embates de quienes quieren leyes para trabajadores baratos olvidando que desde hace mucho tiempo estos trabajadores están luchando por su dignidad, por ser iguales al resto de la sociedad.
En contraposición a aquellos recordamos nuestro día con el precepto de lo que fue la modificación a algunos artículos del Código de Comercio que fueron revolucionarios para esa época. En aquellos años, por 1933, hablar de vacaciones, licencia por maternidad, preaviso e indemnización por despido era casi imposible. Y se logró, pero además fue la base de las conquistas propulsadas más tarde por Perón desde la Secretaría de Trabajo, a la que llegó el 10 de Diciembre de 1943 y se mantuvieron vigentes hasta la creación del Régimen de Contrato de Trabajo establecido por la Ley 20.744 en el año 1973.
Nosotros celebramos orgullosamente nuestro día, conscientes de lo que significó y de lo que significa, ni más ni menos que un quiebre en la historia laboral argentina en favor de los trabajadores, del eslabón más débil. Por suerte desde 2009 tenemos una ley que nos ampara y dejamos de debatir si el 26 de septiembre trabajamos o no. Esta ley, dispone que el “día del Empleado de Comercio” se considera día de descanso para los mercantiles y que además tendrá a los efectos del cobro, todos los beneficios de un feriado nacional.
En realidad todas esas pequeñas cosas no hacen más que agigantar nuestra responsabilidad. No sólo con los trabajadores, también tenemos que hacer docencia, debemos ser maestros para los jóvenes, para que sepan de dónde venimos, para que valoren todo lo que se consiguió y para que sigan en la misma senda, de la responsabilidad, del trabajo y de la justicia social.
Esta celebración también debe ser un día de reflexión. Estamos en tiempos donde se vetan leyes a favor de los trabajadores; donde se señala que el trabajo es un “costo”; donde se dice que los trabajadores “ponemos palos en la rueda” a los empresarios; donde algunos buscan flexibilizar y precarizar el trabajo.
Este día de celebración también debe ser un día de reafirmación de nuestros derechos como trabajadores. Se debe escuchar bien fuerte en toda La Pampa, se debe escuchar bien fuerte en toda la Argentina: el TRABAJO ES UN DERECHO HUMANO GARANTIZADO POR LA CONSTITUCION NACIONAL.
Como en la época de los años 90 algunos quieren sindicatos débiles porque quieren trabajadores débiles, quieren trabajadores que sientan la presión y la angustia de ser despedidos. Nosotros queremos sindicatos fuertes, porque queremos trabajadores fuertes que se sientan bien representados y bien defendidos.
También es un día para hacer memoria, es un día para ser agradecidos. Hoy tenemos un modelo sindical argentino y tenemos un modelo de derecho laboral gracias al compromiso de los trabajadores que dieron y estamos dando testimonio del valor de la participación, del valor de la organización y del valor de la unidad sindical.
Seamos agradecidos con los buenos trabajadores, con los buenos delegados y con los buenos empleadores que estoy seguro son mayoría en la Argentina.
En el ámbito local nuestro gremio da una muestra cabal de lo que acabo de decir. Estamos trabajando más que nunca en el aspecto laboral porque son tiempos difíciles. Los medios dan como válidos 200 mil despidos en la que va del año, nuestros trabajadores están preocupados y tienen angustia. Es lógico que así sea.
La tarea del Centro de Empleados de Comercio es asesorarlo, guiarlos, aconsejarlos y sobre todo hacerles ver que los derechos son irrenunciables.
El sindicato está con las luces de alerta sobre el tema. Además estamos trabajando en el Senado de la Nación tratando que nuestros inspectores y los de todos los sindicatos tengan una mayor jerarquía, asimilándose a la de Policía del Trabajo. Si conseguimos esto, podremos detectar infracciones de empleados no registrados o mal registrados, lo que será un avance fundamental en contra de la informalidad laboral, que es lo mismo que decir precarización.
Cuando hable de tiempos difíciles me refiero a esto, porque nosotros damos batalla contra la precarización al tiempo que el gobierno, que debería cuidar el empleo, presenta leyes que hacen de la precarización laboral una constante. Aquello de trabajo decente, estable y sustentable para ellos pareciera que no cierra.
Siempre digo que la tarea más importante de nuestro sindicato es la contención. En base a esto trabajamos en lo laboral y en el tema social apuntalando con el PAIS (nuestro programa de inclusión social) a la obra social donde no cubre algunas necesidades que entendemos básicas para los beneficiarios. Esto para nosotros no es un gasto sino una inversión que agiganta la calidad de vida de los empleados de comercio y por eso tratamos de aceitar el sistema para que se maneje con la mayor celeridad posible.
En épocas complicadas como esta lo que hacemos es tratar de incentivar a la imaginación pretendiendo que las necesidades que les ocurren a nuestros beneficiarios puedan ser mitigadas o subsanadas por el accionar gremial. Esto es posible en base a nuestra gente que está siempre militando en cada comercio, en cada empresa dispuesta a trabajar en beneficio de sus compañeros.
Es por eso que hoy quiero llegar una vez más con total franqueza y agradecimiento a cada empleado de comercio por su apoyo y reconocimiento, esperando que tengan el mejor día con un fuerte abrazo de compañeros.
Y decirles que solo con trabajadores con salarios dignos tendremos una Argentina más justa y más segura”.