El septuagenario condenado por violación sometía física y económicamente a su víctima

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2 Septiembre, 2016 a las 19:26 hs.

Fueron 17 años de abusos. Hubo violencia pero también sometimiento por ayuda económica para la hija que tiene con la damnificada.



La condena por abuso sexual a 12 años de cárcel para un hombre de 76 años, dictada este mediodía, no fue una más. Tuvo pormenores expuestos en el fallo que demostraron que el sometimiento de una víctima a abusos de índole sexual no siempre están vinculados a la violencia física, sino que los abusadores suelen utilizar otros artilugios para someter a sus víctimas.

El juez de audiencia Marcelo Luis Pagano señaló en su resolución que “se ha probado que todos los encuentros sexuales entre victimario y víctima han sido concretados sin el consentimiento válido por parte de esta última, en principio por la importante diferencia de edad existente entre ellos (46 años) lo cual, al momento de comenzar los abusos sexuales contra Y cuando tenía prácticamente 13 años, implicaba en ella una inmadurez que le impedía ser consciente de lo que le hacían, lo que fuera aprovechado por un hombre que en aquel momento tenía alrededor de 59 años”.

Además determinó “la existencia de amenazas, golpes y hasta la utilización de cuchillos y de un arma de fuego para doblegar la voluntad de la víctima la cual tenía temor al acusado y de la implicancia que tenía si se conocía lo que éste le hacía”.

A lo dicho se suma que el violador “también aprovechaba su necesidad económica para lograr que acceda a su deseo sexual a cambio de dinero para su hija biológica. Por ello opino que no ha existido un comercio o acuerdo sexual entre G y YB tal como señala el acusado, sino que los accesos carnales se han logrado utilizando medios comisivos típicos como son las amenazas, la violencia y el abuso coactivo, siendo que este último medio coexistía con los otros para que el imputado lograra su objetivo de satisfacer sus deseos sexuales”.