Cuatro becados, uno de ellos piquense, estuvieron recientemente en el instituto ubicado en Bariloche y dejaron una buena impresión.
La orientación en automatización industrial de la carrera Ingeniería electromecánica de la Facultad de Ingeniería (UNLPam) culmina con cuatro actividades curriculares que se cursan en el Instituto Balseiro (IB), en Bariloche. Durante cinco meses, los alumnos que completaron los requerimientos académicos, viven, sienten, piensan, comparten y son parte del centro de formación e investigación más destacado del país.
El desafío es grande, por momentos pareciera demasiado. “Los profes son exigentes al máximo”, cuentan los cuatro alumnos que finalizaron recientemente su experiencia: Alejandro Masante, de General Acha; Ariel Sosa Visconti, de Santa Rosa; Emiliano Peroti, de Realicó; y Matías Paesani, el único piquense del grupo.
Cuatro flamantes graduados que trabajaron a la par de profesionales que son brillantes en lo suyo y que, siendo alumnos, aprendieron a fuerza de prueba y error. “Costó pasar de la teoría a la práctica. Las fórmulas que en los papeles daban, al ponerlas en práctica, fallaban, y había que replantear las posibles soluciones”, cuenta Ariel, uno de los chicos que comenzó Ingeniería electromecánica, sabiendo que quería hacer la orientación, ya que es a lo que se quiere dedicar: “automatización y control”.
“Todos los ejemplos son reales”, refuerza Matías, y continúa Alejandro: “Veníamos acostumbrados a hacer informes (monografía y fundamentos teóricos), y en Balseiro en seguida ponés la teoría en práctica, observás reacciones y corregís. De esos resultados, vas armando tu informe”.
Compartieron con estudiantes de Mendoza, La Plata, Rosario y del propio Balseiro. En el día a día notaron -y valoraron- la excelente formación en materias de Control y ciencias básicas, lo cual los ponía en un lugar de referencia para sus compañeros, y de par, con algunos de sus profesores. “Al principio te achicás un poco porque ves gente súper especialista, pero al momento de conversar, muchas veces, nos entendíamos a la perfección”, cuenta orgulloso Emiliano.
Es ese mismo orgullo el que hoy tiene la Facultad de Ingeniería, que recibió elogios por parte de los referentes de Balseiro, por la conducta ejemplar y el desempeño alcanzado a lo largo de la experiencia, lo cual se vio reflejado en la presentación de los trabajos finales de los jóvenes. “Dado el nivel del que estamos hablando, no es habitual recibir este tipo de devoluciones. Por eso creemos que es necesario contar esta noticia a toda la comunidad. Son jóvenes pampeanos, alumnos de nuestra institución, que llevan la vida de cualquier otro chico, pero que son merecedores del elogio por parte de todos. Honraron el vínculo con Balseiro y eso debe ser noticia”, concluye Hernán Prieto, Decano de la Facultad de Ingeniería.
Finalmente, los alumnos destacaron la ayuda económica que recibieron para llevar adelante la estadía en Bariloche. “Fue muy buena. Alcanzó perfecto”, cuentan. El Decano, por su parte, explicó que “es decisión de la Facultad, sostener la beca, ya que es fundamental para los alumnos, y cuando la devolución es tan buena, justifica todo esfuerzo”.