Una organización que brega por derechos de animales consideró que son “mensajes” de la “Mafia Galguera”. Piden prohibir las carreras.
“La mafia galguera empezó a dejar ‘mensajes”, sostuvieron desde la comunidad “Proyecto Galgo Argentina”, una entidad que busca la prohibición de la explotación de los perros de esta raza que son utilizados para carreras.
Respecto al caso más duro, el presunto asesinato de un can en nuestra ciudad, informaron que “este perro galgo con una soga al cuello y la cola amputada, estaba tirado en la Ruta Provincial N° 1 y calle 6, a las 11 de la mañana del día 10 de mayo”.
“¿Qué culpa habrá debido pagar?, ¿El avance de un Proyecto de Ley de Prohibición de Carreras de Perros? ¿Una apuesta perdida? ¿Un pago atrasado según los códigos mafiosos?”, se preguntaron los activistas.
“Podemos imaginar el terror y espantoso dolor que habrá sufrido este perro galgo cuando le cortaron la cola, lo ataron con una soga y lo arrastraron violentamente por el asfalto atado a un vehículo. ¿Cuántos galgos más deben morir agónicamente o ser muertos en vida para que los políticos dejen de abrevar en la miseria de estos inocentes?”, manifestaron con enojo.
Remarcaron luego que “los galgos no son recaudación, no son deporte, no son familia galguera, no son tradición, no son pasión. Los galgos son los rehenes de una cultura del juego, de la vagancia, de las apuestas, de las drogas, de la desidia, del abandono, de la crueldad y de la inocultable connivencia delictiva entre funcionarios públicos y galgueros”.
Al caso mencionado hay que mencionar el hallazgo el lunes de una perra de la misma raza, con una lesión grave en la pata delantera derecha, abandonada en el centro de la ciudad. No es algo atípico, ya que la aparición de especímenes de este tipio con lesiones es algo que se da con cierta regularidad en General Pico, terminando generalmente en la Refugio Canino. ¿Es una casualidad o simplemente se descarta a la máquina de hacer billetes cuando ya no los genera?
El tema es de profundo debate y el reclamo por una ordenanza que prohíba las competencias es de larga data, sin embargo ninguna determinación fue tomada hasta ahora por la comuna local. Según propias manifestaciones de funcionarios en los últimos días a medios colegas, el Ejecutivo espera la aprobación de algún tipo de ordenanza por parte del Concejo Deliberante, que a su vez aguarda la presentación de proyectos por parte de los activistas defensores de los derechos de los animales y de los organizadores de las carreras de galgos, con el fin de analizarlos y darles tratamiento.
Más allá de que el aporte de los entendidos en siempre valorable, siendo una situación ampliamente conocida surgen obvias preguntas que cualquier ciudadano puede y debe hacerse: ¿Es necesario esperar a que sea la propia gente quien redacte los proyectos, cuando está en juego la integridad física y emocional de un ser vivo? ¿No se supone que se les paga un oneroso sueldo a los concejales locales para que den respuestas a los vecinos y cumplan tareas elementales del Poder Legislativo como la redacción de los proyectos?