La víctima es Esther López de Auad (58), nacida en General Pico y se fue de la ciudad desde muy joven. Su hijo la encontró sin vida dentro de su casa.
El cadáver fue encontrado en los primeros minutos de la madrugada de ayer por el hijo de la víctima, Nahuel Auad, cuando regresó a la vivienda que compartían tras atender negocios en campos dedicados a la ganadería, agricultura y un aserradero en la localidad de Monte Quemado, población rural distante a 230 kilómetros de la capital provincial.
Al momento del hallazgo, el cadáver todavía mantenía dos cuchillos, que eran parte de la decoración en las paredes de esa vivienda, clavados en el tórax.
Cuando residía en General Pico, López se domiciliaba en calle 12 entre 21 y 23 a metros de las vías del ferrocarril, contaron amigos cercanos a infopico.com.
La autopsia, según publica el diario EL Liberal, determinó que durante el ataque la mujer recibió 23 puñaladas en distintas partes del cuerpo. Los investigadores secuestraron en la escena del crimen un bolso con ropa de hombre y algunos estimulantes sexuales, por lo que se sospecha de alguna persona cercana a la víctima y con quien habría mantenido una relación íntima.
En esa línea, el diario agrega que, según las observaciones en el domicilio, las cerraduras no estaban forzadas. Los investigadores no descartan que el homicida haya compartido un desayuno con quien sería su víctima, ya que los estudios arrojaron que la empresaria murió a las 15.
El cadáver de la esposa del ex diputado provincial de Santiago del Estero Rodolfo Auad, fallecido hace dos años en el vuelco de una camioneta, se hallaba entre la cocina y el living comedor de la casa situada en San Martín al 300, en el barrio Congreso.
La hipótesis de la venganza está fundamentada especialmente por el ensañamiento con el que fue realizado el ataque. En las próximas horas, la clave de la investigación será un celular hallado junto al cadáver, el cual no pertenece ni a la empresaria ni a su hijo.
Desde un primer momento, los pesquisas descartaron el móvil del robo y relacionaron el ataque con alguna persona con íntima relación con la víctima.
El juez de Instrucción en lo Criminal y Correccional de IV Nominación, Miguel Moreno, habilitó su despacho para recibir una serie de testimonios, principalmente de familiares y vecinos de la víctima, con el fin de poder establecer los últimos movimientos de la víctima e identificar al atacante.