Los piquenses y gente de localidades aledañas visitaron hoy el paseo de los Inmigrantes donde los festejos por el 110 Aniversario de la ciudad brillaron en calidad, diversidad y cantidad.
Hubo dos escenarios por donde pasaron artistas locales, tanto bailarines como músicos. Hubo artesanos, manualeros y emprendedores que mostraron sus producciones.
El patio de comidas típicas, los infaltables choripanes y helados completaban la oferta, en este caso gastronómica.
También se hicieron públicas numerosas instituciones del medio que mostraron sus actividades a través de folletería y la conversación con los que paseaban. En fin… el aniversario de Pico fue un lugar de encuentro, de arte, de producción.
Y el feliz cumpleaños sonó varias veces por los micrófonos y en las voces de la gente que se sumó.