El juez de control Néstor Daniel Ralli formalizó la investigación fiscal preparatoria contra Sergio Raúl Longo y Gastón Emilio Moreno, por el delito de coacción y afectación de la libertad de trabajo y asociación (artículo 149 bis segundo párrafo y 158 del Código Penal), a raíz de una protesta realizada en enero del año pasado frente a la planta de lácteos “Don Felipe”, en Macachín.
Según el informe de prensa del STJ, “la denuncia que originó la apertura de la investigación fue presentada por el abogado Román Molín, quien dio cuenta que ese día un grupo de personas estaba obstruyendo el ingreso y egreso de vehículos y de personas de la planta, ubicada sobre la ruta provincial 1.
De acuerdo a esa presentación, la medida habría sido iniciada por Héctor Samuel Medina, quien había sido despedido días antes y no había aceptado la indemnización ofrecida por la empresa ya que pretendía ser reincorporado.
Molín –que figura como damnificado en la investigación– planteó en la denuncia que la escribana Delma Sánchez constató que los dos ingresos estaban obstruidos por vehículos, fuego y manifestantes que vestían remeras amarillas, y agregó que “las acciones coactivas ponen en riesgo no solo el patrimonio y la producción” de la planta sino que además “amedentran con temor a los empleados que en su totalidad quieren continuar trabajando y también reclaman medidas en favor de la normalización de la situación”.
Longo tiene 36 años, Moreno 39 y ambos son Trenque Lauquen y empleados de la firma Mastellone. En la audiencia del miércoles el fiscal Carlos Ordas pidió que se tenga por formalizada la investigación preparatoria contra ambos y detalló que los hechos ocurridos entre el 27 y el 30 de enero, mientras que el defensor oficial Pablo De Biasi simplemente se notificó de ello.
La formalización original había sido dispuesta por el juez de control, Daniel Saez Zamora, el 30 de enero de 2014, pero por una cuestión formal Ordas debió volver a pedir ahora una nueva audiencia.
En caso ocasión, Saez Zamora había ordenado que “se levanten las medidas de hecho tomadas por los trabajadores o no trabajadores de la planta” y que se libere el acceso, “permitiendo el ingreso y egreso de los trabajadores como así también de camiones; todo ello para el normal funcionamiento de la misma y el cese de toda acción que implique molestias a personas que ingresen y egresen de dicha planta”.